
Entrando en argumento, "Four Rooms" narra cuatro disparatadas historias que ocurren en las diferentes habitaciones de en lo que su día fue un prestigioso hotel de Los Ángeles, en plena Nochevieja. En él, el encargado de los servicios durante todo la noche es Ted, "El botones" (Tim Roth), el cual se encontrará en un entramado diferente de cada uno de los huéspedes, un tanto peculiares, que llamarán continuamente a éste desde su habitación para hacerse con sus servicios y hacerle la vida imposible, en cada una de ellas:
The Missing Ingredient, por Allison Anders, en la Suite Nupcial se alojan un grupo de brujas con el objetivo de resucitar a su Diosa mediante un conjuro a falta de "el fluido de la vida", el semen, que más tarde buscarán como no en el bueno de Ted, el botones.

The Misbehavers, dirigida por Robert Rodríguez, en la 309 se encuentra un mafioso escrupuloso y con mala leche, el cual deja a sus hijos bajo custodia de Ted mientras él y su mujer salen a celebrar el fin de año, lo que no sabe Ted es como se las gastan estos niños..
The Man From Hollywood, y finalmente el turno de Quentin Tarantino para deleitarnos una vez más con una historieta que se desarrolla en la Suite Presidencial del hotel, donde el mismo Tarantino hace de un famoso actor, Chester Bush, el cual pasa allí la Nochevieja con sus amigos, entre ellos Bruce Willis y Jennifer Beals (de nuevo), y donde no encuentran otra manera de divertirse que bebiendo al límite y haciendo una apuesta muy arriesgada donde otra vez tendrá cabida el omnipresente Ted, el botones.
La magnífica actuación de Tim Roth encarnando el papel de un botones, chistoso y en ocasiones de dudosa ambivalencia sexual, y las inesperadas y chocantes escenas de estos cuatro desgarradores directores del cine independiente hacen de esta una película caprichosa de ver.

Lo mejor, unido a lo anteriormente destacado, la interpretación de un joven Tim Roth que lleva el protagonismo de la película a mi parecer de una manera incansable y divertida, Tarantino tanto en actuación como en dirección, siendo así para mi la suya, la mejor historia de las cuatro, además de por la debilidad que siento hacia el cine de Tarantino (todo sea dicho), porque coincide con ser la que mas me entretuvo, aun siendo la última y de más corta duración, además de contar en ella con la participación de algunos de sus actores en Pulp Fiction. Remarcar las constantes referencias a Jerry Lewis y Alfred Hitchcock, los característicos y violentos diálogos cargados siempre de crítica social, y el sorprendente final de la historia. También la parte de Rodriguez me pareció buena, el cual se hace de notar una vez más en su linea de historias disparatadas, con un gran Antonio Banderas que muestra su polifacética capacidad de interpretación.
Quizás lo peor sea, la flojedad de los guiones e incluso en ocasiones la monotonía intencional de la película, las irregularidades en cuanto a una historia y otra, la pésima actuación de una Madonna de la cual se puede esperar más (obtuvo el premio a peor actriz de reparto en los premios Razzie del 96), y en general ese primer sketch de Allison Anders, el cual narra una historia totalmente fantástica y que llega a ser aburrida e incluso absurda en momentos.
La crítica en general, por entonces la catalogó como divertida, disparatada e independiente, a la vez que irregular, vamos en linea a los primeros trabajos de los directores que guionizan y dirigen la película , como son Tarantino, Rodriguez o Rockwell.